Bien lo dijo el diputado federal Humberto Aguilar Coronado “El Tigre” cuando estaba en campaña: el proceso electoral 2023-2024 fue el más violento en la historia de México. Múltiples asesinatos y atentados contra candidatos y funcionarios mancharon la contienda que desembocó en la elección de la primera mujer que será nombrada Presidenta de la República.

Puebla no fue la excepción, candidatos asesinados, baleados y no solo ellos, también sus familiares fue una constante en la entidad poblana. Sin embargo, no es mi intención recordar cada uno de estos capítulos desafortunados que en su momento fueron noticia.

Lo que sí hay que remarcar es que aunque las elecciones terminaron, por lo menos en Puebla la violencia contra funcionarios y exfuncionarios sigue constante, y el día de hoy les mencionaré tres casos puntuales de esta situación.

Aunque esto ocurrió antes que finalizara el proceso electoral, la realidad es que tomó fuerzas después de culminadas las elecciones. El alcalde de Zapotitlán de Méndez, Emiliano Vázquez Bonilla, acusado en 2023 por disparar contra una escuela mientras se encontraba en estado de ebriedad protagonizó otro hecho delictivo.

Ahora fue acusado de participar en el homicidio de Ramón Malagón García, quien era escolta del ahora presidente municipal electo, Salvador Tino Martínez. A diferencia de lo ocurrido con la escuela, es que en esta ocasión sí existen videos donde se le ve cometer el delito, por lo que el alcalde ya se encuentra prófugo de la justicia.

Como segundo hecho, apenas este viernes 21 de junio, fue asesinada Socorro Barrera Sánchez, quien fungió como titular de la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, baleada en un autolavado de Izúcar de Matamaros.

Un dato que es indispensable poner en la mesa es que era testigo “protegida” por la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso del atentado contra las hermanas Hoyos López, periodistas de este municipio, además de tener poco tiempo de haber sido despedida por la presidenta municipal Irene Olea, así que si me lo preguntan, las autoridades deben empezar su investigación por ese lado para que en caso que el Ayuntamiento no tenga nada que ver, empezar a deslindar responsabilidades y evitar malos entendidos.

Y para cerrar con un fin de semana violento en Puebla, fue asesinada la presidenta del DIF municipal de Acteopan, María Elianet Sandoval Castillo, atropellada presuntamente por su esposo, el edil Álvaro Tapia Castillo quien casualmente no ha podido ser localizado, o en otras palabras ya se encuentra prófugo de la justicia.

La ola de violencia que está dejando el periodo post elecciones ya reportó tres asesinatos, en los que en dos ya se encuentran dos presidentes municipales inmiscuidos y prófugos y destacar que dos de los tres casos se deberían tipificar como feminicidios, algo que no recuerdo que haya ocurrido anteriormente en un mismo mes.

Pero mientras vemos si esta violencia disminuye o aumenta, y si en los tres casos antes mencionados logra aplicarse la justicia y castigar a los responsables, nosotros nos leemos mañana en El Acuario.