El Instituto Nacional Electoral (INE) envió un aviso preventivo al Partido de la Revolución Democrática (PRD) por su pérdida de registro nacional al no alcanzar el 3% de la votación federal en los comicios del pasado domingo 2 de junio.
Por medio de un documento que emitió la Unidad Técnica de Fiscalización (UTF) se dio a conocer que el Sol Azteca entró en “fase de prevención”, esto debido a que el Consejo General debe de validar los cómputos de la elección, en la cual se demostró que el instituto político no alcanzó la voluntad popular necesaria para mantenerse con vida.
Tras esto, es el turno del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para que analice el caso y emita una declaratoria oficial o revierta lo analizado por la autoridad electoral; sin embargo, es el primer paso para que desaparezca el partido que irrumpió en el Sistema Político Mexicano 35 años atrás y que abonó a la discusión pública la importancia de la alternancia y los derechos humanos.
Es importante destacar que el máximo tribunal en la materia tiene hasta el mes de agosto para resolver las impugnaciones que pueda presentar la dirigencia del Sol Azteca; sin embargo, se notificó que la Comisión de Fiscalización del INE realizará un sorteo para conocer al interventor que llevará a cabo la liquidación del partido político.
De acuerdo a la información que dio la autoridad electoral, el instituto político seguirá recibiendo el financiamiento público que le corresponde por ley, esto por los próximos seis meses, es decir, será acreedor a 39 millones 377 mil 785 pesos en el tiempo que le queda de vida.
De lo anterior, el Sol Azteca podrá hacer uso del dinero para pago de personal, pago de impuestos, gastos de mantenimiento y servicios públicos; no obstante, todo lo anterior deberá de ser autorizado por la Unidad Técnica de Fiscalización.
En específico, los gastos que podrán hacer son los siguientes:
- Sólo se podrán pagar gastos relacionados con la nómina e impuesto.
- Deberá suspender cualquier pago a proveedores o prestadores de servicios.
- No podrá celebrar contratos, compromisos, pedidos, adquisiciones y obligaciones. Los que celebre, adquiera o realice, serán nulas.
- Suspenderá pagos de obligaciones vencidas.
- Se abstendrá de enajenar activos del partido político.
- Se abstendrá de realizar transferencias de recursos o valores a favor de persona alguna.
- Deberá de entregar de manera formal, a través de acta de entre de recepción al interventor, describiendo a detalle los activos y pasivos que constituyen el patrimonio del partido, así como las contingencias de las que se tenga conocimiento.
- No podrá realizar actividades distintas de las encaminadas a la recuperación de cuentas y a hacer líquido su patrimonio.
Pese a la inminente desaparición, como se mencionó, esta tiene que se corroborado por la Sala Superior del TEPJF y puede tardar entre meses y años, debido a que pueden seguir teniendo pequeña fuerza a nivel municipal o local; sin embargo, a nivel federal el Sol Azteca contará con dos senadores y un diputado federal, aunque no tiene derecho a plurinominales.
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) surgió a partir de la confluencia de diversas fuerzas políticas y movimientos sociales que buscaban construir una alternativa de izquierda al entonces hegemónico Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Entre sus fundadores o personajes más representantes destacaron el excandidato a la presidente, Cuauhtémoc Cárdenas; el expresidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, y el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
La formación del PRD fue precedida por el Frente Democrático Nacional (FDN), una coalición electoral que compitió en las elecciones presidenciales de 1988 y denunció fraude electoral tras la controvertida derrota de Cárdenas frente a Carlos Salinas de Gortari. Este evento catalizó la cohesión de diversas corrientes políticas al interior, que incluyó a exmilitantes del PRI, miembros de la izquierda socialista, movimientos ciudadanos y grupos sindicales.
El PRD jugó un papel crucial en la transición democrática de México durante la década de 1990 y principios de los 2000, promoviendo reformas electorales y la descentralización del poder. En 1997, el Sol Azteca logró su primer gran éxito electoral al ganar la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal con Cárdenas como candidato, marcando un histórico triunfo en la capital del país.
A lo largo de su trayectoria, el instituto ha enfrentado diversas crisis internas y divisiones, especialmente a partir de 2012, cuando López Obrador dejó el partido para fundar el Movimiento Regeneración Nacional (Morena). Esta ruptura debilitó significativamente al PRD.