El país está entrampado en su bipartidismo; afortunadamente el ala demócrata puede recapitular

Luego del atentado en contra de Donald Trump el pasado fin de semana, su camino rumbo a la Presidencia se convirtió en una carrera prácticamente ganada. Sin embargo, a una semana del atentado y con la selección como candidato republicano de Trump, la política norteamericana volvió a tomar un giro con la declinación de la candidatura que hizo pública Joe Biden.

Este acontecimiento se debe a las debilidades o incapacidades de Joe Biden para articular una plataforma política que pueda contener a Trump, a las presiones de otros actores del partido demócrata y al reconocimiento de la dificultad para competir con una condición que parece grave por su edad.

La declinación de Joe Biden abre la posibilidad de que Kamala Harris asuma la candidatura del Partido Demócrata. Actualmente es la primera vicepresidenta de Estados Unidos, mujer afroamericana y con ascendencia asiática; también se anotó Michelle Obama. En ambos casos lo histórico sería que los demócratas postulen a una mujer afroamericana para competir contra el racista de Donald Trump.

Según el diario The Economist, Trump tiene el 75 por ciento de las probabilidades de ganar, aunque aún se encuentra en una competencia cerrada en seis estados, por lo que un escenario que terminaría por desbalancear el país norteamericano es que Trump gané el voto popular, pero que no gané en el Colegio Electoral los puntos necesarios.

El escenario tambaleante de la política norteamericana empieza a tener repercusiones en México, ya que en un discurso el expresidente Trump denostó a Marcelo Ebrard públicamente. Este condenable acto fue rechazado por Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, y nos debe convocar a reflexionar. Nuestro país debe estar atento y preparado para negociar con Donald Trump si es que logra la Presidencia.

La política norteamericana se está reconfigurando y enfrenta desafíos significativos. El partido demócrata tiene que unificarse para poder disputar en serio la presidencia a Trump. Es una competencia de percepciones en la que Kamala Harris debe convencer al electorado de que es capaz de ganar y combatir la campaña que en su contra iniciaran los republicanos.

@ACarvajal06