Que gran diferencia entre perseguir y atraer, el que persigue corre, se agita, se cansa, el que atrae simplemente ha elevado su energía interna a tal punto que las circunstancias comienzan a moverse hacia él las oportunidades, las ideas, las personas correctas y todo empieza a alinearse porque el universo si reconoce una mente clara, fuerte y enfocada.

El universo no premia al sudor, premia la vibración si esto te resulta incómodo lo entiendo, es porque desde pequeños se nos premió por hacer,

no por pensar

 se nos aplaudió por obedecer

 no por imaGinar

Todo gran constructor de riqueza primero imagino, no pico piedra a ciegas sin un plano, primero vio en su mente lo que quería crear luego ajustó su energía emocional a esa visión y después actuó,

pero su acción fue como una flecha lanzada desde un arco perfectamente tensado por la claridad y la fe, aquí es donde ocurren los verdaderos milagros.