Aprovechando que ya estamos en temporada de Halloween y Día de Muertos les quiero contar una breve historia de terror que ocurrió en Puebla capital, donde el protagonista y responsable de todos los sucesos fue el ya ex alcalde Adán Domínguez.
Todo surgió a raíz de su mentira, de que tanto él como su administración trabajarían hasta el último minuto de su administración, nada más alejado de la realidad, pero vamos por partes.
Todo inició con la victoria de Pepe Chedraui, candidato de la Cuarta Transformación en Puebla capital en el pasado proceso electoral, mismo que presentó a un Adán Domínguez receptivo a los resultados mostrando apertura al proceso de entrega-recepción con su sucesor.
En esos días surgió la gran mentira del sustituto del Presidente Municipal: “El actual ayuntamiento de Puebla trabajará hasta el último minuto del 14 de octubre para entregar una capital de 10”, algo que en su momento todos aplaudieron.
Pasaban las semanas y las reuniones entre Adán Domínguez y Pepe Chedraui hacía creer que la capital poblana sería el ejemplo a seguir de todos los municipios, pero aquí es donde empieza la trama tenebrosa.
Primero, los ambulantes se empezaron a desbordar en el Centro Histórico y lejos de arreglarlo de buena manera, Adán Domínguez mandó a cerrar las calles donde regularmente se ponían afectando el libre tránsito y la economía de muchos comercios establecidos en dichas vialidades.
Esto desembocó en múltiples protestas realizadas por comerciantes informales y formales, teniendo que intervenir las cámaras comerciales. Al no poder arreglarlo, los funcionarios salientes optaron por rendirse y hoy por hoy los vendedores ambulantes ya están desbordados por todo el Centro Histórico de Puebla capital.
Segundo, el ex tesorero del Ayuntamiento de Puebla, Omar Coyopol, dio a conocer los problemas económicos de la comuna que ascendían a 600 millones de pesos, algo que se solucionaría con un crédito por el mismo monto que se pediría a una semana de entregar la administración.
Adán Domínguez esperó hasta que se hiciera grande la “bola de nieve” para salir a decir que no era cierto, que su ayuntamiento tenía finanzas sanas y que el crédito no se pediría, pero siendo honestos, ya nadie le creía.
Por último y como cereza del pastel esta la siguiente situación: por semanas se estaba quejando Adán Domínguez que no podía cubrir todos los baches de la ciudad porque no había dinero suficiente y el “cerrón de boca” tuvo que venir desde el Gobierno estatal.
El gobernador Sergio Salomón presentó el programa de “Bacheo Nocturno” en la zona conurbada de Puebla, diciendo que él haría lo que no les importó realizar a los presidentes municipales de esta área, incluyendo al edil de la capital poblana.
En conclusión, el único Informe de Gobierno de Adán Domínguez al frente de Puebla capital tuvo más mentiras que verdades, su frase que repetía hasta el cansancio que trabajaría hasta el último día no se cumplió y su último pase de lista realizado el lunes por la mañana fue una faramalla para creerse la mentira de que entregaron buenos resultados en la ciudad.
Para finalizar y previendo que va a querer pegarse a Eduardo Rivera (el alcalde por el que la ciudadanía sí votó en 2021) en su búsqueda de la dirigencia estatal del partido al que está afiliado voy a decir lo siguiente: “Por el bien del PAN no le den ningún puesto a Adán”.
Dicho esto solo me queda decir que nosotros nos leemos la próxima en El Acuario.